LA TRAMPA

El avispero me ilumino
incrédula de mi, corrí...
Cuando con mis ojos vi
que no era tu única mujer
se me partió el corazón
llanto y dolor.

Tendida sobre la cama
palpitan tus recuerdos
tus besos en mi boca,
caricias fundiéndose en mi piel,
tu mirada delicada
llenándome de calor.

Todo fue una mentira
escupiéndome de tu boca
que tu ya no me querías
impostor y manipulador,
me dices que no me dejas
para que mis ojos no lloren mas.

Tus palabras fueron cortes en mi piel
cínico y beato a la misma vez
jugaste con el amor que te di.

Ahora mi soledad
se ha llenado de tristeza
que se funde con la oscuridad
sin ganas de vivir.
Ni con quien poder llorar...
que amargo es vivir así.

Ahora en mi jardín
no hay albor de dulce olor,
se marchito tu dulce flor
con las raíces casi muertas
vivo en profundo dolor...

( para anabel garrido polo)