8 de enero de 2014

SECRETO EN LA NOCHE



 
Ya puedo ver a lo lejos
la neblina que viene espesando en sus pasos.
Con el gélido frío
resuenan los chasquidos en las marañas,
el forraje se viste de albino
alrededor de los troncos.
Todo lo natural va desapareciendo
en la marcha del humo blanco.
Y acunada por la noche
va devorando lo evidente.

La distancia se acorta
en este lado del pantano
y siento la humedad
acariciándome las manos,
anonadado espero la caricia.
La intriga domina mi inconsciencia
observando la delicadeza y el recelo
Por ver que se esconde en la extrañeza
con la que viene a visitarme.

En la orilla, a mis pies, la niebla ha detenido su marcha
y del centro de la duna percibo una figura,
se disipa la bruma en su contorno
y veo la belleza de la muchacha
que viene vestida negro,
con una corona ciñendo su pelo
inclinada sobre su torso
su espíritu abandona su cuerpo
viniendo a mi encuentro
se convirtió en mi secreto.

Enlazándose a mi ser, ha dejado caer sus ojos
sobre el calor de mi pecho
para dejarme su testimonio
con lágrimas de sus ojos
haciéndome vivir sus sentimientos.

Mi piel absorbe su llanto
empapando mi alma
veo su deseo delirante,
quiere dejarme como recuerdo
el beso secreto con sus labios trasparentes,
la niebla me ha envuelto en los olores de su cuerpo
cayendo en sus fauces me ha poseído en la magia de su noche.

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